Análisis del conflicto colombiano
Sin duda que Juan Manuel Santos ha hecho lo que le place como presidente de Colombia, pues no hay Congreso de la República que lo controle, ni organismos de control que le pongan talanqueras a su desfasado y oneroso egocentrismo, ni medios de comunicación críticos, ni académicos con visión de conjunto que desaten el debate.
Prueba de estas afirmaciones es que la Contraloría General de la República ha sido ciega, sorda, muda y contemporizadora con la sumatoria de los excesivos gastos en autopublicidad de pacifista en todos los medios de comunicación posibles, los incalculables costos de las delegaciones de “negociadores en Cuba”, los continuos viajes pantalleros del presidente Santos; por ejemplo el más reciente a Europa para ir a pedir limosna a otros mas “vaciados” verbigracia España y Portugal; la dedicación absoluta de la canciller Holguín a ser la jefe de imagen personal de Santos, los gastos de la innecesaria visita del eterno y cuestionado príncipe de Inglaterra y las visitas a Colombia de otros personajes de ese perfil , el boato de la improductiva cumbre de Cartagena para ayudar a Obama a la reelección a cambio de una ridícula foto de Santos en la portada de una revista gringa, etc.
Si alguien totalizara esos desmedidos gastos, es probable que conluyera que con ese dinero tan malgastado, se habrían paliado muchos de los problemas sociales que aquejan a Colombia y que en apariencia justifican las Farc, como la razón de su accionar criminal contra el país.
Por ejemplo, se podrían construir y dotar muchas escuelas en comunidades deprimidas, o instalar puestos de salud, o dotar hospitales, o abrir caminos de penetración para sacar productos agropecuarios a los mercados nacionales e internacionales, o mejor dicho integrar las regiones al epicentro político, económico y social del país.
Pero no. El tropicalismo y la vanidad de quien prefiere fletar un avión oficial lleno de “lagartos” politiqueros enmascarados con el ampuloso nombre de "asesores" en este viaje, para hacer un costosísimo eurotur en aras de ambientar en el viejo continente la idea de que, Santos es el necesario Premio Nobel de Paz. No importa que las Farc le hagan conejo al país, pues allí Santos tendrá la misma disculpa mediocre de Pastrana luego del fiasco del Caguán: “Las Farc no me cumplieron la palabra”, pero yo soy pacifista..
Da grima evidenciar que ese costoso viaje de paseadores por Europa, solo sirvió a Santos para hacer politiquería barata a su favor, con el cuento de la paz. Y a los mandatarios europeos para darse vitrina de pacifistas sin comprometerse a nada concreto. Pero ¿qué más se podía esperar de España y Portugal donde la politiquería y la corrupción ha obligado varias veces a Alemania a “tirarles un cable” y ayudarlos a salir de las crisis?. Inglaterra asumió la posición de mandamás del mundo y allí hubo solo el tradicional frío protocolo inglés. Y la canciller alemana que tiene lo que le falta a Santos, comenzando por el carácter, la reciedumbre en sus puntos de vista, el amor y la visión futura de loque significa la patria, le acomodó un préstamo de 100 millones de euros, que tendremos que pagar los colombianos, para coadyuvar al ansiado premio Nobel de nuestro presidente viajero.
Son muchos los interrogantes, que la prensa enmermelada, el congreso silencioso y cómplice por inacción, la Contraloría callada, y la academia hechizada con el cuento chino de la paz a la vuelta de la esquina, deberían despejar, para orientar a la opinión pública. Por ejemplo:
¿Son tan incapaces los embajadores y cónsules colombianos acreditados en Europa, que no pueden hablar con los cancilleres de esos países para buscar esos compromisos teóricos, que consiguió Santos en el costoso viaje del reciente eurotur?
¿Es tan inepta la canciller Holguín, que no puede dirigir y coordinar ese proyecto, y que solo está capacitada para actuar como mandadera y escudera de Santos, para mantenerse en la cancillería hasta pensionarse con jugosa asignación y no en otra dependencia estatal con menores ingresos, a cambio de buscar el inmerecido Premio Nobel de Paz para su jefe o hacerle campaña para la Secretaría de la ONU, como hizo Noemí Sanín con César Gaviria para la Secretaría de la OEA, a costa de los impuestos que pagamos los colombianos?
¿Es que en el Palacio de Nariño no hay equipos de alta tecnología, para que el presidente colombiano se quede en el país, atendiendo los innumerables problemas que nos aquejan, y por este sistema tan actualizado de comunicaciones, haga teleconferencias con sus pares en Europa, para decirles lo mismo y evitar ese oneroso gasto, rodeado de un séquito de zalameros y demagogos, que encarecen los gastos del Estado y dan más razones a la guerrilla para atacar a Colombia?
¿Por qué la prensa no recolecta, analiza y publica con verdadero sentido periodístico, todos los datos de cuanto ha costado al país la propaganda de Santos, la farsa de La Habana y los gastos suntuosos de toda este andamiaje, montado solo con el deseo que nuestro veleidoso presidente sea Premio Nobel de Paz, y luego apunte su brújula a redondear la búsqueda de ser el Secretario de la Onu, ya que el nunca quedaría bien en el sector privado…privado de carro oficial, privado de avión oficial, privado de escoltas, privado de honores y privado atenciones inmerecidas, etc…?
En fin.. La tragedia de Colombia es muy grande y los actuales dirigentes políticos carecen de la estatura y la visión para ver el bosque más allá de los árboles. Todo indica que seguiremos así, pues eso es lo que da la tierra y escasea el abono para mejorar la cosecha.
Mejor cerremos este artículo con algo de humor sarcástico, que en forma viral circula por las redes sociales, parodiando la obra El Renacuajo Paseador del célebre poeta colombiano Rafael Pombo, la cual tal vez se hubiera escrito tal cual, si Pombo estuviera vivo hoy:
SANTINFLAS EL RENACUAJO PASEADOR
El niño vanidoso, Santin renacuajo
Salió para la Habana muy tieso y muy majo
En avión oficial, cohorte de lambones
Viáticos pagos y comodidades a montones.
-¡Muchacho, no vengas¡- le gritan las Farc
pero él hace un gesto y orondo se va.
Halló en el camino a Maburro, un bribón vecino
Y le dijo: -¡mi nuevo mejor amigo!: ¡venga usted conmigo,
Visitemos juntos a nuestro idolatrado comandante,
Habrá francachela y habrá comilona.
A poco llegaron a la isla del dictador,
Maburro estira el cuello, coge el aldabón,
Da dos o tres golpes, Fidelito el bandido, pregunta: ¿quién es?
-Yo mi amo dictador, beso a usted los pies
¿Está usted en casa? -Sí señor sí estoy,
y celebro mucho ver a ustedes hoy;
estaba en mi oficio, negociando la coca,
planeando crímenes, destruyendo a Venezuela
y legitimando a las Farc
pero eso no importa; bienvenidos son.
Se hicieron la venia, se dieron la mano,
Y dice Maburro, que es más veterano:
Mi amigo Santinflas, ansia de figurón,
Démele un mojito, hágame el favor.
Y en tanto que el pillo consume la jarra
Mandó el viejito terrorista traer la guitarra
Y a maburro le pide que cante
Versitos de las Farc con tonada elegante.
-¡Ay! de mil amores lo hiciera, mi amo Fidel,
pero es imposible darle gusto ahora,
que tengo el gaznate más seco que estopa
y me aprieta mucho esta nueva ropa.
-Lo siento infinito, responde la vieja rata cubana,
aflójese un poco chaleco y corbata,
y yo mientras tanto les voy a cantar
el himno de nuestras adoradas Farc.
Más estando en esta brillante función
De baile y cerveza, guitarra y canción,
Los marines, la CIA y la DEA salvan el umbral,
Y vuélvese aquello el juicio final
La ruda CIA trinchó por la oreja
Al bruto maburro maullándole: ¡Hola!
Y los marines a la vieja rata cubana
Unos por la pata y otro por la cola
Santin renacuajito mirando este asalto
Tomó la toga y la capa que le regalaron en España,
dio un tremendo salto,
traicionó a sus contertulios,
como hizo con quienes votaron por el en su país,
Y abriendo la puerta con mano y narices,
Se fue dando a todos noches muy felices.
Para no perder su nobel de paz,
Asi tenga que entregar el país a las Farc
Y siguió saltando tan alto y aprisa,
Que perdió la capa dorada, rasgó la camisa,
se coló en la boca de un Eln tragón
y éste se lo embuchó de un solo estirón
Y así concluyeron, uno, dos y tres
Maburro y Fidel, y santín después;
Marines, DEA y CIA comieron y el Eln cenó,
¡y Roycito el lambón,solito quedó!