Análisis del conflicto colombiano
Publicado en la Edición 35 de la Revista Armas y Letras de la Escuela Militar de cadetes el 16 de diciembre de 1992
El apoyo de la población civil es el mas importante fundamento de la guerra, que se puede aplicar para combatir exitosamente a los terroristas que intentan instaurar en Colombi auna dictadura totalitaria. La dimensión sociopolítica de este fundamento en el campo militar quedó definida a partir del momento en que el Ejército colombiano incluyó dentro de la doctrina táctica el precepto de la opinión pública como uno de los principios de la guerra. Para contar con el concepto favorable de esa opinión, debe preexistir el apoyo de la población civil hacia las Fuerzas Militares materializado en hechos concretos. Así las operaciones fructificarán.
Para desarrollar operciones militares contra un grupo de bandoleros dentro de un área específica, es necesario conocer sus características desde los puntos de vista político, militar,a dministrativo y sicológico. De esa manera será posible también, establecer su vulnerabilidad.
Un comandante de tropas que conoce en detalle los procedimientos y la metodología subversiva de los bandoleros que delinquen en su jurisdicción, tienen la gran oportunidad de colocar su unidad en el nivel de excelencia operacional.
Los subversivos se asientan en un área geográfica después de haber adelantado un intenso trabajo de masas, orientado hacia el dominio y el control de la población civil. Inicialmente, llegan los comisarios políticos a desarrollar programas de orientación comunitaria con base en la organización colectiva luego incuban el virus "revolucionario" dentro de la comunidad. Es común que seleccionen jóvenes con capacidad de liderazgo, a quienes envían a las ciudades capitales para adelantar cursillos de filosofía materialista, lucha de clases y manejo de estructura clandestina (Farc).
El trabajo político-militar que adelantan las células subversivas dentro de la población civil, es denominado por los delincuentes "trabajo amplio" y "trabajo clandestino". El "trabajo amplio" son todas aquellas actividades abiertas amparadas en la legalidad y realizadas bajo la protección de las bondades del sistema democrático (Farc-Epl). Se consideran como "trabajo clandestino" todas las actividades subrepticias que adelantan los insurgentes para desestabilizar el orden legal.
Dentro de este tipo se encuentran el trabajo político organizativo, la creación de bases de apoyo, la organización de grupos de estudio y trabajo, la constitución de núcleos clandestinos, la conformación de autodefensas revolucionarias o milicias y la integración de bandoleros plenamente concientizados, a lo que de manera insolente se han atrevido a denominar "escuadras militares" (Eln).
Para derrotar una cuadrilla es necesario partir de la base de que no basta con causarle bajas de personal y decomisos de material (30% del éxito operacional). A la acción militar es imperioso añadirle un alto índice de contenido (acción sicológica, frustración administrativa de los delincuentes y vuelco de la opinión pública a nuestro favor), lo cual corresponde más o menos al 60 ó 70 por ciento del total de la estrategia antisubversiva.
El ELN y las FARC definen la guerra como la continuación de la política por otros medios. Para ellos no existen diferencias entre la guerra y la paz, porque la paz tiene que ser armada y no habrá paz mientras que Colombia sea un Estado socialista.
Para las organizaciones subversivas la política es el componente supremo y la esencia de su lucha. La tesis guía, que sustenta la combinación de todas las formas de lucha, es una concepción acomodada de la política.
Es vital que los comandantes de tropas tengamos la claridad y la precisión acerca de la dimensión de la guerra que libra la nación entera contra estos bandoleros politizados.
El Ejército colombiano es la Institución de mayor raigambre popular en el país. Oficiales, suboficiales y solddos provenimos de las diferentes esferas civiles. Esto quiere decir que nos une un cordón umbilical de interdependencia y de mutua necesidad.
Estamos enfrentando a un enemigo gelatinoso, habilidoso, desleal, traicionero, que engaña a los campesinos y los enfrenta contra los soldados. Si aseguramos la opinión pública a nuestro favor, como consecuencia de un trato respetuoso y sincero hacia ella, ganaremos esta guerra.
Obras del coronel Luis Alberto Villamarín Pulido