Análisis del terrorismo internacional
El ataque terrorista perpetrado por un sujeto de nacionalidad uzbeka a bordo de un camión en New York, en las ciclo-rutas de la calle West Side, tiene todas las características de un acto preparado por una célula yihadista de ISIS, dada la similitud del modus operandi con atentados perpetrados por este grupo en diferentes lugares del mundo.
Aunque las autoridades neoyorquinas se apresuraron a asegurar que si es un acto terrorista pero que es aislado perpetrado por un “lobo solitario", la situación indica otras realidades, que los países afectados por el yihadismo no quiere reconocer.
El ataque es icónico porque se realizó en una fecha trascendental para los niños en los países occidentales especialmente en Estados Unidos. Coincide con el anuncio de los países con intereses geopolíticos en el Medio Oriente que supuestamente ISIS está acorralado. Y se ejecuta en el Bajo manhattan muy cerca del World Trade Center para demostrar que el yihadismo está vivo dentro de Estados Unidos y cualquier país occidental.
Según informaciones iniciales del New York Times, el atacante utilizó un vehículo rentado en New Jersey, lo que coincide con otros actos similares en otros países. Sin embargo como suele suceder en eventos desatados por los terroristas, hay mucha especulación inicial.
Está probada la presencia de miles de uzbekos combatiendo con ISIS en el Medio Oriente, lo cual es un serio indicio para los gobiernos afectados por el yihadismo, que debido a la metodología de vinculación familiar de los yihadistas en el planeta, es obvio que los uzbekos residentes en USA deben ser controlados por los organismos de seguridad, así como los imames de las mezquitas adonde asisten estas personas pues por lo general allí es donde se radicalizan.
No es cierto que existan “lobos solitarios” porque ISIS, Al Qaeda, los talibán e inclusive los chiitas de Hizbolá, son organizaciones terroristas piramidales estructuradas, en las cuales, las células desarrollan tareas preaprobadas por la dirigencia, máxime en este caso que se pretendía agredir el eslabón más débil de la cadena de valores occidentales, pues al parecer el objetivo final era demoler a los niños que salían de una escuela pública, precisamente en el día mas icónico de los niños occidentales.
Además por documentos incautados a los yihadistas, se sabe que así como los islamistas pretenden desarrollar al estrategia del vientre para incrementar el número de musulmanes en Occidente con miras a avanzar haca el objetivo final de la islamización planetaria dirigida por un califato central, es necesario eliminar de raíz a los infieles cruzados y judíos, asesinando a sus niños.
Máxime que el día y la noche de las brujitas son vistas por los puritanos ultra-ortodoxos salafistas sunitas, como un procedimiento de herejía que debe ser castigado con la muerte de los infieles por ir en contra del profeta y de Alá.
De contera, este no será el último ataque terrorista del yihadismo en Estados Unidos, pues allí hay muchas las células yihadistas estimuladas por imames casi todos entrenados en Arabia Saudita bajo la égida del salafismo puritano, e imbuidas por conceptos doctrinarios de odio contra infieles judíos y cristianos o apóstatas chiitas y no salafistas.
Y esas células se multiplican con mensajes atroces convertidos en actos de fe, debido a que los adoctrinadores de nuevos terroristas, presentan a los ojos y oídos de los yihadistas, que los suicidas islámicos son mártires de la causa, que llegarán al cielo y que deben ser imitados.
Todo parece indicar que por estar inmersos en peleas políticas internas, ataques mutuos partidistas, intereses personales, y deseos de poder, los gobernantes de los países afectados por el yihadismo siguen desenfocados de la gravedad del problema, y en contraste los yihadistas, cobijados con las garantías sociales, políticas y migratorias de quienes los acogen, siguen desarrollando su lucha demencial contra quien les da la mano.
En consecuencia, es probable que vendrán más acciones terroristas del yihadismo en Estados Unidos y los países occidentales, sin que haya coordinación suficiente de los organismos de seguridad para prevenirlos, sin que se controle efectivamente a los imames extremistas y sin que se actúe con certeza sobre las comunidades con nexos sanguíneos con los yihadistas que delinquen en el Medio Oriente, en nombre de la hermandad y solidaridad musulmana del planeta.
Coronel Luis Alberto Villamarín Pulido
Especialista en defensa nacional, estrategia y geopolítica
Lectores de Geopolítica del Terrorismo Islámico también leyeron:
Lea mas acerca de Geopolítica del Terrorismo Islámico por Luis Alberto Villamarin Pulido