Transcurridos 180 días de la invasión rusa a Ucrania, materializados por la barbarie de los agresores contra el patriótico pueblo agredido, quedan sobre el tapete importantes conclusiones para los periodistas, y lo estudiosos de la historia, la geopolítica, las ciencias militares, la estrategia, la administración, la solución de conflictos, la sociología y la sicología.
Desde la óptica político-estratégica queremos resaltar algunos aspectos atinentes a este complejo fenómeno bélico desatado el 24 de febrero de 2022 en Ucrania, que por la naturaleza de sus alcances puede inclusive hasta causar un desastre nuclear.
Primero: Nunca antes en ninguna guerra internacional, los contendientes habían utilizado con tanta asiduidad y cobertura planetaria los medios de comunicación tradicionales, los alternativos, las redes sociales y la difusión ideologizada voz a voz. Por extensión y sin matricularse del todo en los grupos de partisanos, la población civil ucraniana ha colaborada de manera admirable en la movilización nacional de las fuerzas militares de su país.
Así movilización y guerra de propaganda, han ido de la mano. Indisolubles e impredecibles.
Segundo: Las acusaciones mutuas por los ataques con armas de grueso calibre en la central nucleare de Zaporizhia, sumados a los discursos belicosos de los diplomáticos rusos, y la latente amenaza de armas nucleares por parte de Putin, han mantenido al planeta en vilo acerca de cuál es la próxima jugada estratégica de ambos contendientes.
Tercero Sin duda las academias militares, están obligadas a revisar y replantear la doctrina de las maniobras combinadas en el campo de batalla. La estruendosa derrota del poderoso ejercito ruso en los alrededores de Kiev, y la audaz combinación de partisanos, guerrillas y tropas regulares en entornos tácticos de defensa móvil , mediante múltiples contraataques y ataques de desarticulación, efectuados por las Fuerzas ucranianas, preludian que si Rusia no negocia y convence antes a su contraparte, soportará con el paso del tiempo, la pérdida de lo que ha ganado por la fuerza en el Donbás y en Crimea.
Lo conseguido por las fuerzas de Putin en Mariupol, luego de la histórica resistencia de los ucranianos y del batallón Azov, no es fijo ni definitivo. El apoyo con armas, entrenamiento e inteligencia integral de combate, técnica y estratégica, han permitido que las tropas ucranianas sean cada vez más efectivas con métodos de combate irregular en un escenario de combate irregular.
Las armas enviadas por Estados Unidos y otros países de la OTAN han dado realce a los ucranianos patrióticos, para seguir luchando en aras de recuperar el control sobre todo su entorno territorial.
Cuarto Ninguno de los dispositivos tácticos de las tropas en los teatros de operaciones urdidos por Rusia, han resultado efectivos para su plan estratégico. Pese a los depredadores ataques de fuerza aérea y artillería, Rusia sigue sin lograr sus objetivos políticos superiores en la región. Y se expone a sufrir sorpresivos ataques de comandos en su propio territorio.
Quinto: Pese a las divergencias internas, a las fricciones derivadas de la aún inexistente político de integración total de la Unión Europea, cumplidos los primeros seis meses de iniciada la invasión a Ucrania, Estados Unidos ha logrado una importante sinergia en la OTAN, diferente a la incertidumbre en que estuvo la administración Trump en su espinosa relación con Europa.
Sexto: Indefectiblemente las dirigencias políticas de la OTAN, han buscado en sus países, obtener logros políticos con miras a futuros eventos electorales . Macrón fue elegido, Biden busca robustecer a su partido para las elecciones de Midterm en noviembre. Mientras tanto Putin y Xi Jing Pin, explotan al máximo, el poder de la propaganda al interior de sus fronteras, desprestigiando permanentemente a Estados Unidos.
Adendo: La doble moral china frente a la agresión rusa contra Ucrania, refleja una política exterior de las potencias actuales, en otra especie de guerra fría.
Séptimo: Putin no ha cambiado de objetivos estratégicos y programas imperialistas a mediano y largo plazo. Debido a que Occidente ha asumido una posición contraria a las ambiciones del Kremlin, indefectiblemente lo único valedero, es que la guerra se prolongará en una multiplicidad de combates de desgaste, acusaciones múltiples y riesgos de que ocurra un desastre nuclear.
Octavo: Entretanto, Zelensky dejó de ser el comediante de televisión, para convertirse en el líder mundial más admirado en pleno siglo del poder de la información y las redes alternativas de comunicación social masiva, nada de raro sería que resulte siendo escogido como el Premio Nóble de paz para 2022
Noveno El ingreso de Suecia y Finlandia a la OTAN, pese a la mañosa manipulación de Turquía, así como el comprometimiento frontal de varios miembros de la Alianza para apoyar a los ucranianos, no solo es un desafío a Rusia, sino algo que marca las tendencias geopolíticas venideras en el planeta. Después de esta guerra, el mundo ya no será el mismo pacífico de la postguerra.
Décimo: Sin tener un desenlace a la vista, episodios como la mediación de la ONU y Turquía con Ucrania para permitir sacar los granos, no son hechos gratuitos, ni impiden que la guerra siga su fantasmal espiral de destrucción.
La duda de todo esto, es si Rusia tiene realmente la capacidad de avanzar hacia el sueño zarista de Putin. O, si después de los sucesivos fracasos tácticos derivados del coraje ucraniano y de la calidad de apoyos bélicos recibidos de la OTAN, la salida de las tropas rusas de territorio ucraniano, sea un escollo que pueda soportar el autócrata Putin, sin actuar con medidas retaliativas? Lo superará la ya golpeada economía rusa? Y muchas dudas más.
Todo está por verse.
Teniente coronel Luis Alberto Villamarín Pulido
Autor de 40 libros de geopolítica, estrategia y defensa nacional