Análisis del Conflicto Colombiano y Defensa Nacional
Invitado por el Programa Panorama Mundial de la Cadena internacional de televisión CNN en español, que dirige la periodista Angela Patricia Janiot, y transmite desde Atlanta-Georgia para el mundo, el coronel de la reserva activa del Ejército de Colombia, Luis Alberto Villamarín Pulido analizó via Skype desde Bogotá- Colombia, las razones políticas y estratégicas por las cuales es completamente improbable que se firme un acuerdo de paz con las Farc el proximo 23 de
El presidente Santos dice un día una cosa, al día siguiente cambia de manera de pensar y finalmente termina haciendo lo que le ordenan las Farc. Esto ocurrió con la fecha del 23 de marzo. Santos y Timochenko se reunieron el 23 de septiembre de 2015 en Cuba y acordaron un plazo de seis meses, pero no para firmar un acuerdo de paz, porque lo que está tratando de firmar es el acuerdo para la terminación del conflicto. Las Farc aprovecharon ese lapso para buscar ventajas en el tema de la justicia transicional, en todo lo que favorezca a los terroristas.
Como ese tema quedó cojo porque finalmente no se ha concretado todo lo referente a la justicia transicional, entonces las Farc están diciéndole a Santos de frente que el 23 de marzo es imposible firmar el acuerdo de paz porque además hay muchos aspectos pendientes.
Entonces después de que el presidente Santos salió a los medios y los regañó hace 15 días, y les dijo a los cabecillas que si no se devolvían para La Habana y que si no se firmaba el acuerdo el 23 se acabarían los diálogos, ya está echándose para atrás, está cambiando de tercio, terminará cediendo y así tendremos conversaciones con las Farc, por uno, dos tres cuatro o cinco años más, pues a las Farc no les interesa hacer la paz sino obtener legitimación política, es decir que se les quite el rótulo de terroristas, sin firmar ningún acuerdo de paz.
Ni el gobierno ni las Farc han sido claros en que es lo que realmente ya está acordado, o que esta pendiente. Entonces, por ejemplo el Centro Democrático que es el partido de la oposición dice que hay 56 subpuntos sin acordar, las farc dicen que son 40 y el comisionado Humberto de la Calle dice que son 29. Sin importar cuál es el número exacto de asuntos por concretar, estos incluyen la parte agraria, la parte política, lo relacionado con el tráfico de drogas ilícitas la reparación de las víctimas y la justicia transicional, es decir que hay una gran cantidad de subpuntos que no están resueltos en los cuatro o cinco puntos que supuestamente ya están acordados.
Esto significa que no se ha acordado nada y que lo que se ha hecho es hablar y hablar durante 40 meses. Y las Farc han insistido que quieren una asamblea constituyente, no para refrendar los puntos acordados en la habana, pues según ellos lo que allí se acuerde se debe dejar asi, sino que se requiere una asamblea constituyente que los blinde jurídicamente, es decir que nunca sean juzgados por los crímenes cometidos y que por el contrario se les den todas las garantías para participar en política sin importar sus historiales delictivos.
Ese es el gran problema que tiene Santos en el tema de la refrendación de los acuerdos, y a eso súmele el otro problema que es el de la entrega de las armas. El planteamiento de las farc es quedarse con las armas y que en la medida en que se vayan cumpliendo los acuerdos de la Habana, las Farc “pensarían” en dejar las armas, o sea insisten en ser partido político armado, e insisten en un armisticio.
Véase la gravedad del asunto, Armisticio es un acuerdo entre dos estados, en el cual ambos estados suspenden las hostilidades bélicas, que se pueden reiniciar cuando una de las dos partes lo considere conveniente para sus intereses. Es muy distinto a un acuerdo de paz. De esto se infiere que las Farc le siguen mintiendo al país, y que el presidente Santos es víctima de su afán de ser galardonado con el premio Noble de Paz, y de firmar lo que le pongan por delante para pasar a la historia como el presidente que firmó un acuerdo de paz con las Farc.
Una cosa es la buena voluntad para resolver un conflicto tan complejo como el colombiano y otra cosa bien diferente es responder con medidas estratégicas a la estrategia del adversario, y en este caso las Farc no están en proceso de paz, están en guerra y le agregan en guerra por la paz. Para lograr sus objetivos las Farc utilizan una serie de estratagemas y de engaños a los cuales no se les ha dado la respuesta como es, entonces las Farc están utilizando esta ventaja para seguir tras la toma del poder por medio de la combinación de las formas de lucha,
La habladuría del presidente Santos es completamente negativa pues se han gastado mas de 100.000 millones de pesos colombianos en gastos logísticos generales del proceso de paz, mas de dos millones de dólares para sufragar los gatos de estadía de las farc y los delegados del gobierno encuba, entretanto las farc siguen negociando drogas, siguen preparándose para la guerra, siguen negociando armas en Cuba y siguen engañando al país con el cuento que hay un proceso de paz.
En ese orden de ideas, se debe revisar la agenda puntualizarla y darle fechas concretas de plazo y evitar que la verificación internacional no se convierta en legitimación del terrorismo.
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El coronel Luis Alberto Villamarín Pulido es especialista en defensa nacional, geopolítica, estrategia y contraterrorismo, temas sobre los cuales ha escrito y publicado 28 libros de y mas de 900 artículos especializados.
Estos son algunos de sus escritos
