Publicado enel Diario El Tiempo el 23 de agosto de 1996, sección Información General

     El lanzamiento público del libro El cartel de las Farc sirvió el miércoles para que el Ejército Nacional reforzara una posición que viene tomando de tiempo atrás frente a la guerrilla: la insurgencia es el mismo narcotráfico.

      El comandante de esa institución, general Harold Bedoya, encargado de hacer la presentación del texto escrito por el mayor Luis Alberto Villamarín Pulido, fue quien insistió en lo inocuo que resulta hoy diferenciar entre un delincuente común y uno político. En esta última clasificación se hallan los miembros de la guerrilla.

      Hay que destruir ese mito. En qué categoría podemos calificar a un integrante de las Farc que administra un laboratorio de procesamiento de coca en el Guaviare y protege su negocio con minas quiebrapatas ? , preguntó el general Bedoya al auditorio presente en el lanzamiento del libro.

     Consideró que, por esa razón, no hay que llamarse a equívocos. En Colombia un grupo de mafiosos disfrazados de insurgencia política quieren perpetrar el robo del siglo, la apropiación ilegal de todo un Estado mediante el chantaje violento y el enriquecimiento ilícito .

    Gángsteres con ruana , narcoguerrilleros , integrantes del nuevo cartel de la droga , terroristas , fueron los calificativos que rodearon el lanzamiento del texto.

     El cartel de las Farc presenta un análisis del autor sobre la incidencia del narcotráfico dentro de las Farc, el grupo guerrillero más antiguo de Colombia.

     El texto se apoya en documentos incautados a la guerrilla por el Ejército y en testimonios de habitantes de las regiones donde se cultiva la mata de coca.

     Señala, por ejemplo, que un área de 558 hectáreas puede arrojar 2.200 kilos de coca, lo que representa un valor comercial de unos 736 millones de pesos.

     El libro asegura que ese dato representa un área que no excede el 5 por ciento de la zona donde un solo frente de las Farc ejerce su influencia. El Ejército calcula que existen 60 frentes.

     La publicación anexa las hojas de vida de los integrantes del secretariado de las Farc donde se les asigna la profesión de terroristas .

     En reciente comunicación dirigida al ex canciller Augusto Ramírez Ocampo, Tirofijo dijo que una de las condiciones para concretar un encuentro con representantes del Gobierno era la de eliminar de la jerga oficial los calificativos que la desconocen como fuerza política.