Por coronel Luis Alberto Villamarin Pulido
Escritor estratega
Publicado el 28 de Octubre 2007 10:32 PM en el Diario El Tiempo de Bogotá Colombia.
La conocida de antemano, victoria de Samuel Moreno para la alcaldía de Bogotá, corrobora varios puntos importantes y a la vez encontrados en la vida política nacional que ameritan sesudos análisis por parte de los expertos en ciencias políticas, pero al mismo tiempo un serio compromiso para el Polo Democrático de depurarse por dentro, de ser mas concreto frente al terrorismo y de cumplir las promesas electorales so pena de caer en el círculo vicioso de la politiquería, el clientelismo y los vicios que tanto critican.
- Quedó demostrado por enésima vez que el país quiere mano dura contra la guerrilla a nivel nacional, pero administraciones de orientación popular a nivel local para Bogotá.
- El electorado le pasó cuenta de cobro a Peñalosa por los nunca aclarados casos de insuficiencia de las lozas del Transmilenio y los contratos de los bolardos. Ya se la habían pasado en las elecciones anteriores, pero este hombre que se creía presidente de Colombia (igual que les sucede a Vargas Lleras y Santos, o le pasaba a Serpa), persistió en su propia debacle. Tal vez le faltó hacer una retirada estratégica. La soberbia y la arrogancia que caracterizan a Peñalosa sepultaron sus deseos políticos actuales.
- La idea de construir el Metro para la ciudad, movió a los estratos altos a votar por Moreno Rojas. El hecho de descender del presidente mas visionario del siglo XX en Colombia, gestor de las obras que transformaron el pais de rural en integrada al desarrollo urbanístico internacional, le dieron credibilidad que ahora está obligado a cumplir.
- Sin duda el Polo Democrático se jugó un as estratégico para la segunda posición pública mas importante del país y ganó sobrado, porque no había contra quien.
Pero al contundente y elogiable triunfo del carismático candidato de la izquierda, se le cuelgan serias obligaciones tanto para el como mandatario local de los bogotanos, como para el Polo Democrático en su calidad de partido político, con tendencia a aglutinar los cambios estructurales que no fueron capaces de hacer los dos partidos tradicionales, hoy en declive y serias crisis internas, por apegarse a los legados y costumbres conservadoras y reiterativas de las familias que siempre han ostentado el poder, disfrutado de las mieles de la burocracia e influido en decisiones locales:
- Es imperioso que el Polo Democrático se depure y demuestre a Colombia y al mundo, que son gente de ideas populares sin combinar las formas de lucha. Para ello deben expulsar de sus filas a todas las personas que tengan nexos con las guerrillas o que haciendo parte de ellas, hayan sido partícipes de acciones terroristas. Sin contemplaciones ni excepciones.
- Hacer un pacto de trabajo por Colombia, sin tantas ofensas ni agresividades verbales con el presidente Uribe. Esas ofensas no conducen sino a polarizaciones inútiles.
- Cumplir la promesa de hacer el metro para Bogotá. Es inconcebible que en pleno siglo XX, una capital tan importante como Bogotá, cuatro o cinco veces mas grande y mas poblada que Santiago de Chile no tenga metro, servicio que ya tiene por ejemplo Valencia España, ciudad mas o menos de grande como Bucaramanga. No mas disculpas acerca del suelo y de la conveniencia transitoria de un Transmilenio en el cual la ciudad pierde dinero todos los días. Grandes problemas necesitan grandes soluciones, de líderes resueltos a pasar a la historia.
- Impulsar un estilo ejecutivo de acciones y hechos concretos. No de verborrea muy propia de la izquierda y de los politiqueros de siempre acostumbrados a hablar, provocar, autoatribuirse logros inmerecidos etc.
- La capital tiene mil problemas que necesitan mil soluciones. Para eso, se requiere un hombre activo con liderazgo al frente de la administración y no camorreros. La elevada votación a favor de Moreno reclama dicha actitud de su parte.
- La por siempre deteriorada malla vial es una urgencia. Nadie se explica porque las lozas de la avenida El Dorado construidas hace 50 años están buenas, mientras que las demás vías parecen un sendero de trampas antitanques en un escenario de batalla, debido a la cantidad de cráteres y huecos por deterioro creciente del asfalto.
- Hay altos índices de inseguridad. Demasiado hampón suelto en las calles. Hay atracos permanentes y la policía es insuficiente para atender estos casos. Una de las razones, por estar dedicados a imponer comparendos de pico y placa o multas a toda señora despistada que se demora un poco en el aeropuerto mientras espera o despide a un familiar. Si Moreno quiere terminar de ganarse la voluntad de los bogotanos que le ponga mano dura a la anarquía del transporte y obligue a que los agentes de tránsito hagan cumplir todas las normas, pero sobre todo que la policia cumpla con la seguridad. Si es necesario que devuelvan el tránsito a la alcaldía y se dediquen a combatir la delincuencia. Los cambios radicale sson provechosos asi levanten ampollas o toquen a “vacas sagradas”.
- Al mismo tiempo debe hacer un ingente esfuerzo conjunto con las autoridades judiciales y la inteligencia militar, para combatir las milicias de las Farc y las redes urbanas de las autodefensas ahora llamadas emergentes.
- Continuar y fortalecer programas de beneficio social, en los campos de educación, salud, vivienda, etc, para hacer mas agradable la ciudad. Al mismo tiempo buscar inversión para el desarrollo de la capital. Ojalá invitar capitalistas nacionales y extranjeros para que compren, derrumben y construyan edificaciones modernas y dignas en todas las ollas y “chochales” que pululan en la zona céntrica. La suniversidades podrían jugar un papel importante en el rediseño del centro de Bogotá.
Esto y mucho mas le espera al nuevo alcalde de Bogotá, que si lo logra, podrá aspirar a ser el primer presidente izquierdista de Colombia, pues en la actualidad es el de mayor credibilidad de esa agrupación. Pero claro, necesita que el Polo Democrático se depure y se aleje tanto de los elementos infiltrados por el partido comunista clandestino, como de la politiquería copiada de los ineptos que han tenido a Colombia en el caos.
Bienvenido a enfrentar semejante reto, señor alcalde. Que Dios y la patria lo guíen o si no que el y ella lo demanden.
Coronel Luis Alberto Villamarín Pulido
Analista de asuntos estratégicos