Análisis del conflicto colombiano
Al cumplirse los primeros cien días de las estériles conversaciones de paz en Cuba entre el gobierno colombiano y algunos cabecillas de las Farc, es pertinente hacer un examen a lo sucedido desde noviembre 19 hasta hoy, para puntualizar una serie de mitos y realidades que se han tejido en los medios de comunicación, alrededor del poco claro proceso.
Mito 1: Las Farc se sentaron a la mesa de conversaciones en Cuba, debido a que están derrotadas militarmente.
Realidad 1: Las Farc no han sido derrotadas militarmente. Estaban sepultadas políticamente y por miopía político-estratégica aunada al deseo reeleccionista de Juan Manuel Santos, aprovecharon la oferta de conversaciones, para recuperar presencia mediática, con el objetivo concreto de buscar reconocimiento internacional como fuerza beligerante y fortalecimiento estructural del Movimiento Bolivariano Clandestino que hoy encabezan un sancocho político marxista-leninista, coincidente en todos y cada uno de los planteamientos de Alfonso Cano en el Caguán en abril de 2000.
Mito 2:Las conversaciones van por buen camino y esta vez si habrá acuerdo de paz.
Realidad 2:Mientras las Farc desarrollan con milimétrica precisión su Plan Estratégico, el gobierno nacional llegó a la mesa sin objetivos concretos, sin negociadores preparados y sin un plan coherente. De La Calle dijo que el gobierno no sería rehén de este proceso, pero la verdad es que cumplidos los 100 días, las Farc han puesto el ritmo, manejado los tiempos y dilatado los temas, de la misma manera como engatusaron los gobiernos de Belisario, Gaviria, Samper, Barco, y Pastrana.
Mito 3:Las Farc están divididas entre guerreristas y políticos. Mientras en Cuba están los “políticos” en Colombia se quedaron los guerreristas.
Realidad 3: Lo mismo decían los sapientes analistas del conflicto cuando vivían Cano y Tirofijo. Con los computadores de Reyes, Jojoy y del propio Cano, quedó claro que inclusive Cano era mas criminal y sanguinario que el propio Tirofijo. La realidad de este desenfoque gravita en las técnicas de desinformación utilizadas por los comunistas armados y desarmados para engatusar al enemigo de clase, y en el rampante desconocimiento del Plan Estratégico de las Farc pro parte de todos los colombianos. Además en todas las conversaciones anteriores han estado los llamados políticos, no los encargados directos de las cuadrillas, vg. Alfonso Cano, Márquez. Raúl Reyes, Catatumbo, Simón Trinidad, Carlos Lozada, Pablo Catatumbo, etc.
Mito 4:Las Farc no tienen capacidad para la toma del poder, porque no representan nada en los campos político y armado.
Realidad 4: Este mito se deriva deldesconocimiento del Plan Estratégico de las Farc, que parte del precepto comunista de la combinación de las formas de lucha, entonces todas las actividades abiertas y clandestinas de las Farc y sus cómplices apuntan al objetivo político final. Mientras el mundo avanza a pasos agigantados, para los comunistas no hay afán porque ese desarrollo tecnológico, es apenas una contradicción del capitalismo, que debe ser aprovechada por los revolucionarios armados y desarmados.
Mito 5:El proceso de paz está sujeto a la reelección de Juan Manuel Santos.
Realidad 5:El proceso de paz está sujeto en este y en cualquier gobierno sin importar quién sea el presidente de turno, a que el Estado llegue a la mesa de conversaciones con negociadores idóneos que tengan prediseñado un plan estratégico con alternativas coherentes, y obviamente a la solución de los problemas sociales y económicos de las zonas deprimidas que facilitan la acción propagandística de las Farc y el Eln de reclutamiento de campesinos para la guerra.
Mito 6:La participación de la “sociedad civil” es espontánea y libre de injerencias.
Realidad 6:La sola coincidencia que los “líderes pacifistas” en las zonas de colonización armada instauradas desde hace varias décadas por el Partido Comunista y las Farc, sean los mismos que aparecen como “defensores de derechos humanos”, aportantes de ideas al Foro Agrario y fuera de eso testigos en procesos contra miembros de la Fuerza Pública, indican que detrás de estos “espontáneos” representantes de la sociedad civil están el Movimiento Bolivariano Clandestino, el Partido Comunista Clandestino de las Farc, las Milicias Bolivarianas y sospechosas organizaciones sociales y políticas especializadas en calumniar a toda persona que cuestione los poco claros orígenes de los dineros que financian la propaganda paralela de las Farc.
Mito 7: Para avanzar en los acuerdos de paz es necesaria la tregua bilateral.
Realidad 7:Las Farc necesitan liberarse de la presión militar para incrementar el adiestramiento militar y capacidad operacional de sus cuadrillas, acorde con los lineamientos del Plan Estratégico. Esta propuesta es un ardid político-estratégico de las Farc para meter un caballo de Troya. Podría funcionar si las Farc concentraran en cada región, en un solo lugar del cual no se pudieran mover durante el proceso, a todos los terroristas, las redes de milicianos, los miembros del Partido Comunista Clandestino y el Movimiento Bolivariano.
Mito 8: Los gobiernos de Ecuador, Venezuela y Nicaragua, ya no apoyan a las Farc.
Realidad 8: Todo lo hallado en los computadores de Raúl Reyes es cierto y fuera de eso continúa intacto como proyecto continental de unificación político-organizativa del socialismo del siglo XXI. En ese sentido estos gobiernos son cómplices de las Farc en el tráfico de narcóticos y la búsqueda de reconocimiento político internacional para el grupo terrorista.
Mito 9:La seguridad democrática está igual o mejor que en el anterior gobierno.
Realidad 9: Ni era cierta la alegre o espumosa afirmación del general Padilla con el fin del fin, ni mucho menos el gobierno Santos tiene acorraladas a las Farc. Por el contrario con la estúpida decisión de negociar en La Habana, les facilitó el camino para hacer una conferencia o un pleno ampliado, recuperar la unidad monolítica de acción y estructurar el accionar terrorista de milicias bolivarianas en Nariño, Cauca, Valle, Chocó, Caquetá, Huila, Tolima, Meta, Arauca, Guajira, Norte de Santander, etc.
Mito 10:Las cuadrillas están dedicadas a los negocios particulares de cada cabecilla, que no tienen casi para comer y que hay sentimientos de repulsa contra el Secretariado.
Realidad 10:Si eso fuera cierto, la Fuerza Pública no incautaría a menudo cargamentos de armas y avituallamientos provenientes de Ecuador, Venezuela o Centroamérica. Si fuera cierto que el médico Mauricio del Bloque Oriental y Joaquín Gómez del Bloque Sur no comparten el sainete del proceso de paz en Cuba, ya se habrían independizado públicamente, pues la defensa de los postulados marxistas-leninistas se lo habría impuesto. Conclusión este mito, es producto de la imaginación calenturienta de analistas desubicados, o parte de la estratagema de contrainteligencia fariana, o una sumatoria de las dos.
En síntesis, estos mitos con sus respectivas realidades, son apenas los perfiles de un muestrario de lo que sucede en Colombia frente a un proceso de negociación de paz, que completó 100 días con mucho ruido de tonel vacío y ninguna conclusión favorable al país.
Lo único cierto es que la guerra continúa, que las Farc y sus cómplices siguen empecinados en ganar espacio político y en aplicar la frase de Sun Tzu: “La guerra es el arte del engaño”, por la sencilla razón que mientras para Santos la negociación de paz con las Farc es su trampolín reelectoral, para las Farc, las conversaciones de paz hacen parte del entramado de su guerra narcoterrorista contra Colombia.
Coronel Luis Alberto Villamarín Pulido
Analista de asuntos estratégicos
El coronel Luis Alberto Villamarín Pulido es especialista en Defensa Nacional, Geopolítica y Estrategia. Autor de 20 libros relacionados con el tema y conferenciante internacional. Sus obras son documentos de consulta en prestigiosas universidades internacionales, para la elaboración de tesis de postgrado, maestrías y doctorados.
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